Mburucuyá se ubica en el noroeste correntino y es la cabecera del departamento del mismo nombre. Se encuentra a 148 kilómetros de la capital provincial y tiene alrededor de 7000 habitantes. El nombre Mburucuyá se refiere a una enredadera que crece en cercos y árboles y tiene una fruta naranja comestible.

La ciudad surge en la segunda mitad del siglo XVII, cuando los habitantes construyen una pequeña capilla en honor a San Antonio de Padua. Con el tiempo, se construyó una iglesia más grande que fue inaugurada el 16 de agosto de 1832.

Actualmente, la región se destaca por su producción agropecuaria y forestal. Se cultivan arroz, soja, mandioca, cítricos y hortalizas. Además, hay grandes plantaciones de pinos y eucaliptos.

El paisaje de la zona se caracteriza por altas colinas de arena, bosques y palmeras, pantanos, lagunas y ríos de diversos tamaños. La famosa cañada “Fragosa” (que inspiró una hermosa canción de chamamé) atraviesa el departamento de noreste a sudoeste.

Turísticamente, el principal atractivo es el Parque Nacional Mburucuyá, que se extiende por unas 17.600 hectáreas, las cuales fueron donadas por el Dr. Troels M. Pedersen y su esposa Nina Sinding. El parque cuenta con unas 111 lagunas, además del Estero de Santa Lucía, y una maravillosa biodiversidad que incluye el ciervo de los pantanos, carpinchos, zorros, tatú mulita y aguará guazú. Se encuentra a 11 kilómetros de la ciudad.

Mburucuyá también ofrece un complejo municipal que es un gran atractivo turístico, con hermosas aguas cristalinas y una extensa playa. Los visitantes pueden disfrutar de la belleza de un entorno increíble y pasar momentos con amigos o familiares. El complejo cuenta con parrillas, baños, canchas de fútbol y voleibol, servicio de cantina y todas las comodidades para que los visitantes se sientan cómodos. Este lugar ofrece el espacio perfecto para relajarse a la sombra de los árboles, instalar carpas y pasar el día al aire libre.

Además, al igual que en el resto de la provincia de Corrientes, durante los carnavales de Mburucuyá, el colorido de sus comparsas alegra las noches y convoca a todos aquellos que buscan ser parte de momentos inolvidables. Durante los días de carnaval, los juegos de agua son una ceremonia que se repite año tras año entre niños y adultos que se divierten durante todo el mes de febrero. Por las noches, las calles se llenan de luces y lentejuelas al ritmo de la música.

Si todavía no conocés Mburucuyá, te invitamos a que lo hagas! Te gustaría? contanos en los comentarios!

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